Ciencia en Panamá

La ciencia ha representado en mi vida muchos altibajos. Discusiones con mi papá por que no entendía la fuerza boyante, tutorías para poder encontrar la amplitud de las oscilaciones del péndulo y trasnochadas para aprenderme las nomenclaturas de los alcalinos y los enlaces covalentes. Vaya tiempos aquellos.

Con el tiempo me he dado cuenta que la ciencia es mágica: es ella la encargada de explicar la realidad de la manera más veraz posible. De hecho, una gran parte de los cambios sociales que han ocurrido a través de los tiempos se han dado gracias a importantes avances científicos y tecnológicos. La ciencia no solo está en los laboratorios, está en nuestra vida cotidiana, tanto en la cocina, como en la oficina.

Hay un cierto temor detrás del estudio de la ciencia. Las fórmulas y los números dan miedo, pero en el siglo XXI es imperativo promover una cultura de pensamiento científico y el uso del razonamiento para la toma de decisiones. Es un gran trabajo que está pendiente en los centros educativos y con los profesionales de enseñanza.

Algunos países europeos y asiáticos ya trabajan en estrategias para aumentar el interés en carreras científicas en los jóvenes. Estos países están desarrollando planes de educación STEAM (por sus siglas en inglés), un método de enseñanza que integra las ciencias naturales, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas. Este sistema ayuda a inculcar en los estudiantes las disciplinas necesarias para convertirse en los futuros líderes de una sociedad fuerte y estable, ante los rápidos cambios que están ocurriendo.

Pero el cambio no solo se debe generar en las escuelas. Es importante que existan recursos para la financiación de proyectos de investigación y desarrollo científico. Actualmente las personas que están tratando de hacer ciencia en Panamá lo están haciendo a pequeños pasos, de la mano de instituciones como la SENACYT e INDICASAT, quienes apoyan financieramente a muchos equipos de investigadores. En los últimos años ha ido creciendo el interés y el apoyo hacia la investigación, y los nuevos científicos que se gradúan aquí o en el exterior pueden ejercer en universidades como la Universidad Tecnológica de Panamá y en centros de investigación como el Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales, el Instituto Conmemorativo Gorgas o en el Instituto de Investigaciones Científicas y Servicios de Alta Tecnología (INDICASAT).

La llama del desarrollo científico se ha encendido y es importante mantenerla y fortalecerla. Por eso, el Biomuseo dedica el mes de marzo a las ciencias en Panamá; todos los conversatorios de Experto Visitante los sábados a las 3:00 p.m. estarán dedicados a dar a conocer las innovaciones que se están realizando en este campo en nuestro país.  Los invitamos a que nos acompañen a enamorarnos de la ciencia.